lunes, 3 de junio de 2013

Organización... herramienta indispensable

Buenas tardes gente! Cómo andan? Espero que este mes de junio haya arrancado de 10 y puedan meterle todas las pilas para arrancar el mes del invierno! Yo, en lo personal, estoy con muchos proyectos y trabajos, pero intentando sacar todo adelante. En fin, vamos a lo que nos atañe aquí.

En este nuevo post quiero hablarles sobre algo que me ha ayudado mucho durante mis años de ejercicio de la profesión, y es el aprender a organizarme, organizar mi trabajo y mi turno. Puede sonar algo obvio, pero me parece que es bueno compartirlo, por si alguno está teniendo problemas con este tema. Además de la organización del trabajo en sí, también quiero hablarles sobre un tema relacionado, que es aprender a priorizar nuestras tareas.

Antes que nada, para poder tener una organización eficaz de nuestro trabajo, tenemos que tener en cuenta que, en enfermería, hay MUCHOS elementos del entorno que NUNCA vamos a poder controlar ni anticipar, y que siempre nos van a descontrolar la guardia, y por eso no debemos desesperar. La idea con lo que voy a pasar a escribirles es que puedan resolver estas inclemencias lo más rápido posible, buscando siempre volver al mayor nivel de control de la situación posible.

Un elemento imprescindible para poder organizar bien un turno de trabajo es llegar temprano. Si llegamos justo sobre la hora, o tarde, y ni siquiera tenemos tiempo de saludar a nuestros compañeros por que ya tenemos tareas que hacer, eso nos predispone a tener una muy mala guardia. Llegar a tiempo nos va a ayudar a empezar el turno tranquilo, ordenado y con la cabeza donde corresponde: los pacientes.

Otro elemento muy importante es la recepción de la guardia. No vamos a mencionar lo terrible que el otro turno te entrega la guardia, por que eso está incluido en lo que mencioné en el tercer párrafo de este post, por ende sigamos. La recepción de la guardia debe ser concisa, corta, y con los detalles importantes. Se debe buscar recibir la información básica, importante y útil, para que nosotros podamos hacer nuestro trabajo. Evitar las apreciaciones personales y los chismes, ayudan a disminuir el tiempo que lleva el pase de guardia, y nos evita crear prejuicios acerca del paciente que tenemos que atender.
El pase de guardia, lo ideal, es hacerlo dentro de la habitación del paciente, y con los pacientes que luego atenderé durante el turno. Recibir la guardia de otros pacientes solo ayuda a la confusión.
Al entrar a una habitación para recibir la guardia, presentarse con el paciente, hacerle saber que uno va a estar a cargo de su cuidado es muy importante, sobre todo para darle confianza.
Controlar la permeabilidad de las vías, drenajes y demás, son tareas que se deben realizar con mucho cuidado, para saber en que condiciones se encuentra el paciente con quien vamos a trabajar.

Una vez recibida la guardia, comienza la parte mas importante de nuestra organización del trabajo. En la mayoría de las instituciones en las que me he desempeñado, automáticamente se comienza haciendo el listado de los pacientes a cargo, anotando la medicación que los pacientes van a tener a lo largo del turno y controlando los signos vitales. Esto ayuda a hacerse una idea general de las tareas que se van a tener durante el turno, y el tiempo que vamos a necesitar para realizarlas. Y aquí también empiezan nuestra ardua tarea de priorizar.

Los timbres suenan, los pacientes llegan de quirófano, se internan para ir a quirófano, son derivados de otros servicios o se están por ir de alta; los médicos empiezan a hacer sus rondas, curaciones y las carpetas desaparecen o todas las indicaciones son cambiadas; familiares en los pasillos pidiendo cosas y uno sabiendo que todavía tiene que hacer la medicación a horario. Nuestra cabeza está a punto de explotar y encima, nos damos cuenta que nos quedan 10 minutos para merendar, o cierra la cocina. Que hacemos? PRIORIZAMOS

Tengamos en cuenta, que nuestro trabajo como enfermeros es cuidar al paciente. Y si, dije cuidar al paciente, no hacer de secretario, ni mucamo, ni mantenimiento. Una vez que aprendamos esto, y podamos transmitirlo a nuestros pacientes de una forma respetuosa, vamos a ganar bastante tiempo.
Nosotros, como profesionales, tenemos bases científicas para saber que acciones de las que debemos realizar son más urgentes y cuales pueden esperar. Usando este criterio, debemos ordenar nuestro trabajo.
No es lo mismo un analgésico para un paciente que recién sale de cirugía, que un analgésico que un paciente tiene indicado cada 8 horas y no ha referido dolor; No es lo mismo pedirle a una mucama que alcance una botella de agua, a que tomar una muestra de hemocultivos para poder comenzar con un tratamiento de antibióticos. Y el listado sigue y sigue. Pero parte de nuestro arte es saber encontrar estas pequeñas diferencias, tomar decisiones, hacernos cargo de esas decisiones y trabajar conforme a estas.

Otro punto a tener en cuenta, que lo mencioné brevemente mas arriba, es la participación de los médicos dentro de nuestro cuidado. Nuestra tarea es la de cuidar al paciente (si, lo digo de nuevo, por las dudas no quede claro), y es una tarea que se hace conjuntamente con el médico (trabajo interdisciplinario). Lo que no debemos hacer es convertirnos en mucamos de los doctores tampoco. Cada uno tiene responsabilidades distintas y, por ende, cada uno tiene que cumplir con esas responsabilidades. Ambos tienen mucho trabajo, muchas cosas pendientes por hacer y están cansados, pero no por eso, el enfermero tiene que recargarse con más tareas, solo para que el médico esté mas descansado. Cuando encontramos el equilibrio perfecto de trabajo entre las dos áreas, todo se hace mucho más fácil.

Un consejo especial que me atrevo a darles es: si un paciente toca un timbre, y ustedes no están haciendo una tarea que no puede ser interrumpida, vayan, atiendan el timbre, solucionen por completo el problema, y luego sigan con lo que estaban haciendo. No le digan ya vengo, por que hay muchas posibilidades de que se olviden, de que les surja otra cosa o que se atrasen aún más con lo que les solicitaron. Resuelvanlo en el momento, y se evitaran problemas.

Ya estamos en la recta final de la guardia. Tenemos los pacientes en orden, la medicación hecha, ahora simplemente falta revisar los detalles. Si bien puede sonar tonto, pero los detalles en nuestras guardias, marcan nuestra forma de trabajo, y por ende, nuestra relación con nuestros pacientes, con nuestros colegas y con la institución.

Me parece que abarqué varios puntos que deben ser tenidos en cuenta a la hora de organizar nuestro trabajo y priorizar nuestras acciones. Saben que estoy totalmente dispuesto a discutir los temas aquí planteados y ampliarlos en caso de ser necesario. Solo tienen que pedírmelo.

Un abrazo! y a cuida pacientes!


1 comentario:

  1. Muy interesante y útil. No sólo una herramienta para el enfermero, ni para la enfermería, si no también para los restantes involucrados: pacientes, médicos, otros servicios y la institución misma

    ResponderBorrar